La alegría del perdón

Una de las preocupaciones de Jesús a lo largo de su vida fue curar las heridas del pecado, ofreciendo gratuitamente su paz y perdón. Después de su resurrección sigue la misma trayectoria. En las apariciones a sus discípulos no viene a reprochar, ni exigiendo a Pedro que le pida perdón. Me imagino a éste: su rostro de alegría y su corazón henchido de gozo cuando descubre en el Maestro que solo habla de amor, porque quien se siente amado se siente perdonado.

María Ward, en su experiencia de Dios, descubrió en Jesús la importancia del perdón. Ante tanta incomprensión y persecución, el amor a los enemigos fue una constante en su vida; no solo a los enemigos… incluso a los que le ofendían, por eso nos dirá: «Si alguien te causa ofensas, háblale con amistosas palabras, así aplacarás a los dos, a ti y a él». Esta capacidad de perdón que ella tuvo fue, seguramente, una de sus fuentes de alegría.

Un día en la prisión donde asisto a la Eucaristía dominical, en el momento del perdón, uno de los reclusos se levantó y dijo que se sentía muy mal y pedía perdón a otro recluso porque, decía, por su culpa le habían impedido una visita y por lo tanto le habían privado de ver a sus hijos. El agredido se acercó a él y se dieron un gran abrazo. Una cascada de aplausos sonó en la sala ante el asombro y emoción de los asistentes que experimentamos la paz y alegría del resucitado.

Al terminar la Eucaristía, me acerqué a ambos para felicitarles por su humildad, libertad y capacidad de perdón. Los dos me dijeron lo mismo: “¡no se puede explicar lo que he sentido en ese abrazo y los aplausos!”.

A partir de tus heridas te puedes convertir en curador de heridas ajenas.

Jesús abre las puertas de nuestras prisiones, desmonta los patíbulos a los que a menudo nos hemos arrastrado a nosotros mismos y a los demás. Él sabe perfectamente que solo las personas liberadas y perdonadas pueden llevar al mundo libertad, amor, paz y alegría.

Share This
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos.
Privacidad