En la presencia de Dios

El propósito de este libro es explicar la espiritualidad de una mujer del siglo XVII a la gente del siglo XXI.  Ni más ni menos.

A Mary Ward, en todo caso, se la conoce como la fundadora de las Damas Inglesas, una Orden Religiosa de mujeres dedicadas, principalmente durante casi cuatrocientos años, a la educación de las niñas.  Es verdad que la instrucción y la educación representaron un área importante de la actividad de Mary Ward y sus primeas compañeras desde los comienzos en 1610.  Sin embargo, su objetivo era una participación mucho más amplia en la misión apostólica de la Iglesia, que incluía la atención a las almas y la actividad misionera.  Por esta razón el Papa Pio XII reconoció el significado de Mary Ward en el surgimiento del apostolado laical.

Una importancia similar tuvo la contribución de Mary Ward durante su vida para el desarrollo de la vida religiosa: ella modeló su congregación totalmente en la Compañía de Jesús y se mantuvo firme a pesar de toda oposición.  Las que vinieron después de ella nunca perdieron de vista este objetivo, a pesar de las exigencias de adaptación y la necesidad de un compromiso, teniendo en cuenta las exigencias que la Iglesia les hacía.  Así es como se abrió y se agilizó este camino para las órdenes religiosas femeninas de vida activa, permitiéndoles conseguir la igualdad de reconocimiento en la ley eclesial que a las órdenes contemplativas y ser gobernadas por una superiora general.

Este libro no trata de nada de esto.  Haremos un retrato de Mary Ward desde un ángulo por el que menos se la conoce: en sus escritos y alocuciones desarrolló una espiritualidad única, y esta espiritualidad es relevante hoy día.  No solo puede ser una guía para miembros de órdenes religiosas sino que puede inspirar a todos los cristianos, hombres y mujeres, en su vida personal de fe.

Utilizando el núcleo de esta espiritualidad como punto de partida – vivir en la presencia de Dios – desarrollaré tres grandes temas en el curso de este libro:

• cómo, al estilo de una mujer, Mary Ward interpretó y desarrolló los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola.
• cómo enseñó a otras personas a vivir en animada interacción con Dios de tal manera que la vida diaria y la oración quedaron unificadas.
• cómo afirmó la meta de la realización humana y mostró de qué manera se puede reconocer y llevar acabo la voluntad de Dios.