Se acerca la próxima Cumbre de Naciones Unidas por el Clima, más conocida como COP 28. Esta conferencia internacional tendrá lugar entre el 30 de noviembre y el 12 de diciembre en Dubái, capital de Emiratos Árabes Unidos, pero las reuniones previas serán desde el 24 hasta el 29 de noviembre y son cruciales para definir agendas y temas específicos dentro de la cumbre.

Desde hace años, el IBVM, desde sus diferentes ministerios, trabaja por abordar la crisis climática y sus efectos sobre el planeta y sobre la vida de las personas más vulnerables. Por ello estamos muy pendientes del desarrollo de la cumbre y sus trabajos previos. Queremos sensibilizar a la familia Mary Ward y a toda la gente que nos sea posible sobre la seriedad de la situación y el momento crítico que estamos viviendo, en el que debemos implicarnos sin excusas para salvar la casa común, con toda la vida que la habita, las personas incluidas.

Compartimos la llamada de atención que hace el papa Francisco en su nueva exhortación apostólica Laudato Deum a todos los participantes en la COP 28: “Ojalá quienes intervengan puedan ser estrategas capaces de pensar en el bien común y en el futuro de sus hijos, más que en intereses circunstanciales de algunos países o empresas” (LD,60)

En este marco, Marta Santos, nuestra representante JPIC ha contactado con el Secretario de Estado de Medioambiente, Hugo Morán Fernández, y otros responsables del Ministerio de Transición Ecológica y el Reto Demográfico, para compartirles una serie de propuestas que nos parecen básicas para llevar a la cumbre.

“Nos parece sumamente importante que la delegación del Gobierno de España en la cumbre, que además ostenta la Presidencia de la UE, manifieste su compromiso por cumplir los acuerdos previamente pactados para la efectiva aplicación de la Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático”.

Creemos que las decisiones que se tomen deben hacer posible:

  • Aumentar los Compromisos de Reducción de Emisiones.
  • Impulsar una adaptación al cambio climático que dé prioridad a las personas. Apoyar a los países en desarrollo en sus esfuerzos de mitigación y adaptación al cambio climático.
  • Crear las instituciones necesarias para hacer frente a las pérdidas y daños. Apoyar una nueva financiación adicional, accesible, adecuada y rápida para hacer frente a las pérdidas y daños producidos por el cambio climático en los países más afectados.
  • Proporcionar una financiación adecuada para responder a la crisis climática. Abogar por llegar al compromiso mínimo colectivo de 120.000 millones de dólares hasta 2025. Aunque la UE y sus Estados miembros son los mayores contribuyentes a la lucha contra el cambio climático, la financiación sigue siendo insuficiente y en ocasiones mal dirigida.

Seguiremos informando y organizando eventos en los que aportemos luz y claridad sobre el momento actual.

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